¿Cómo elegir entre Iaas, PaaS y SaaS para su organización?
Hay una tendencia en el mundo de la tecnología de asumir que debemos usar la última innovación para resolver todos los problemas. A menudo expresamos esto parafraseando la ley del martillo de Maslow: «Si usted está sosteniendo un martillo, cada problema parece un clavo”. La computación en nube no es una excepción: todo está yendo hacia la nube, o al menos eso nos dicen.
Para seguir la metáfora, cualquier nuevo servicio en la nube que se presenta se convierte en el martillo, y todas las cargas de trabajo y aplicaciones de una empresa se convierten en los clavos. La cuestión es qué modelo de distribución –IaaS, PaaS o SaaS– es el adecuado para sus necesidades.
Para tomar una buena decisión habrá que conocer la diferencia entre IaaS, PaaS y SaaS
Gracias a estos servicios las empresas y las organizaciones acceden a una determinada tecnología sin verse obligadas a realizar un importante esfuerzo presupuestario para asumir la inversión que supondría adquirir dicha tecnología y configurarla para que alcanzara el mismo nivel de prestaciones que se obtiene al trabajar en la nube, como facilitar el acceso ubicuamente a cualquiera de sus empleados por ejemplo.
A día de hoy es facil encontrar en el mercado proveedores de estos servicios, pero no siempre se obtiene un asesoramiento previo adecuado para determinar si es o no necesaria su subscripción, y en ese caso, cuál de ellos puede ser el más conveniente en función de las características de los procesos de negocio que haya que pasar a la nube.
IaaS: infraestructura virtual para la optimización de recursos
Cuando hablamos de IaaS nos referimos a infraestructuras como servicio. A cambio del pago mensual de una cuota de alquiler, el cliente contrata la infraestructura en lugar de adquirirla en propiedad. Asi es el modelo de Cloud Computing; una suscripción de servicio permite una mayor flexibilidad para elegir la capacidad de los procesadores, la cantidad de memoria RAM necesaria y también las necesdidades de almacenaje en cada caso.
Al acceder a este tipo de infraestructura virtual se obtienen con agilidad otros servicios complementarios como la virtualización de máquinas, sistemas de cortafuegos, o soluciones de backup y balanceadores de carga. IaaS es pues la capa básica que proporciona todo lo necesario para encima se construyan y desarrollen el resto de servicios necesarios para nuestros procesos.
¿Cuándo puede tener más sentido IaaS?
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- Para nuevas organizaciones sin capital para invertir en hardware o aquellas que están creciendo rápidamente y no pueden escalar el hardware al mismo ritmo.
- Para necesidades temporales muy concretas o demanda muy volátil (tas picos muy pronunciados aparecen valles profundos)
- Cuando hay necesidad financiera de de transformar costes de capital en costes operativos
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¿Por qué puede no ser una buena opción?
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- Porqué existan determinados aspectos legales o regulatorios que dificulten el cumplimiento del almacenamiento externo de datos y su procesamiento.
- Porqué sea necesario atender SLA’s muy exigentes o un entorno de alto rendimiento donde la infraestructura propia (o en alquiler en modo dedicado) tengan mayores garantías de éxito
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¿Qué es PaaS?
Las siglas PaaS corresponden a Plataformas como servicio. Este tipo de servicio está especialmente indicado para aquellos desarrolladores que requieren de ciertos entornos en los que lanzar aplicaciones como bases de datos, middleware, herramientas de desarrollo entre otros.
Si lo que el usuario necesita es centrarse en la implementación y administración de las acplicaciones, el PaaS es una opción a tener muy en cuenta, ya que el desarrollador no deberá preocuparse por los requerimientos de hardware y sistemas, con lo podrán optimizar su trabajo al poder focalizarse solo aquello que realmente les interesa.
Podría decirse que PaaS es un nivel superior a IaaS, una evolución en el entorno Cloud que añade recursos adicionales a los que se obtendrían en uns subscripción de IaaS cómo la seguridad, el sistema operativo, las bases de datos y la gestión del ciclo de vida.
A menudo se confunde PaaS con un software, puesto que PaaS no deja de ser un software que permite el desarrollo de otras aplicaciones. Veámoslo con un ejemplo:
Bungee Connect es una de las primeras plataformas comercializada como servicio que permitió el despliegue de aplicaciones en la nube para desarrollo y pruebas de ejecución sin tener que preocuparse por la infraestructura. Otros más conocidos a día de hoy como Google App Engine también sono servicios PaaS.
¿Qué es SaaS?
El software como servicio (Software as a service) es el modelo por el que el software de la organización se aloja en servidores externos y se paga una cuota periódica para utilizarlo. De este modo los usuarios logran la ubicuidad necesaria sin tener que instalar aplicaciones en equipos locales.
Los clientes de servicios de software en la nube pueden dedicar su preocupación a cómo utilizarán los programas y soluciones. Dejará de ser necesario ocuparse de los requerimientos de hardware y la configuración y mantenimiento de los sistemas operativos, entre otros. El proveedor del servicio es el responsable de mantenerlas funcionando correctamente y actualizadas.
El SaaS es más habitual de lo que algunos piensan. Cualuiera que acceda a una aplicación online que se ejecuta en la nube accesible desde Internet está utilizando un modelo de servicio SaaS. Los usuarios de Microsoft 365, los ERP nativos web como Salesforce o Teamleader, o cualquier gestor de contenido para la creación de páginas web como WordPress, son un buen ejemplo de ello.
¿Quién es el responsable en cada caso?
Si se está planteando utilizar los servicios de una nube pública es importante que conozca también el modelo de responsabilidad compartida y qué funciones de seguridad administra el proveedor de servicios y cuáles administra el cliente, puesto que varia en función de modelo IaaS, PaaS o SaaS suscrito. Es fundamental comprender que en cualquier modelo de distribución el cliente siempre tendrá la responsabilidad sobre los datos, los puntos de conexión, la cuenta y la adminisrtación de identidades.
Ante la duda, confíe en un experto
Dependiendo de las necesidades de las organizaciones el modelo de suscripción de servicios cloud para software, plataforma e infraestructuras puede ser la opción más interesante. A día de hoy son muchos los usuarios que confían en tener sus datos en la nube y cada vez son más los que también apuestan por tener su infraestructra como servicios de cloud computing.
Este tipo de servicios conllevan un ahorro en costes al no tener que invertir en servidores físicos, ni en software, como sistemas operativos, licencias o actualizaciones). Además se eliminan los costes de mantenimiento y los de seguridad puesto que ya están inlcuidos en la cuota que se paga por acceder al servicio.
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