6 consejos para afrontar el teletrabajo con éxito

El teletrabajo o home office en inglés permite a un trabajador realizar sus tareas en un lugar distinto al habitual o fuera de su oficina. Internet y las nuevas tecnologías, cada vez más accesibles, lo hacen posible. La conectividad pues jugará un papel determinante para que el trabajador acceda a los recursos y sistemas necesarios y se mantenga productivo. Pero cuando hablamos de teletrabajo, ¿de qué estamos hablando?

En España solo el 16% de las compañías tiene empleados en situación de teletrabajo, frente al 56% de la UE, pero desde la semana pasada, a raíz de la orden ministerial de confinamiento que limita la libre circulación de personas impidiendo el acceso a sus lugares de trabajo, muchas organizaciones han encontrado en el teletrabajo la manera de poder dar continuidad a su negocio. Así que bien sea por un convencimiento estratégico o porque las circunstancias no ha dejado otra alternativa, esta semana se ha registrado un auge del teletrabajo hasta el 72%. Esta incorporación masiva y innegociable al mundo del teletrabajo quizá contribuya a poner de manifiesto algunas de las muchas ventajas que ofrece esta modalidad laboral tanto para el trabajador como la conciliación personal y profesional, y también para las organizaciones, que podrán tener acceso al talento profesional independientemente de su ubicación.

Pero no todo son ventajas. El no saber separar el tiempo de descanso y el de trabajo, comer demasiado porque se está muy cerca de la cocina e incluso pasar bastantes horas sin hablar con nadie absorto frente a la pantalla de un ordenador, pueden llevar a que muchos desistan de la idea romántica de trabajar desde la casa.

¿Cómo teletrabajar sin colapsar en el intento?

Aquí tienes 6 consejos que le ayudarán a mantener su productividad sin estar totalmente absorbido por el ordenador.

Planificación

La mayor parte de la gente está acostumbrada a gestionar su propio tiempo, pero existe un control externo atendiendo a la jerarquía laboral. En el teletrabajo uno debe autorregularse. En la medida que se tiene más independencia para tomar más decisiones, se debe tener más autonomía y tener cuidado en el uso del criterio de qué hacer en cada momento. Organízate qué hacer y cómo vas a hacerlo.

Horarios

Establece unos límites horarios en los que realizar las tareas. Al hacerlo inserta en ellos franjas dedicadas a los micro-descansos. Está demostrado que tomar una pausa de 5 minutos por cada hora trabajada, mejora nuestra capacidad de concentración y rendimiento sostenido. Al organizar los horarios de trabajo-descanso, reserva también suficiente tiempo para la comida. No comas delante del ordenador a toda velocidad. Ni tendrás un buen provecho de los alimentos ni rendirás más por no levantarte de la mesa de trabajo. Lo único que puede pasar es que acabes ensuciando tu equipo.

Vestimenta

La higiene personal y el uso de unas determinadas prendas para el trabajo contribuyen a establecer unas rutinas en base a unos hábitos saludables. El no vestir adecuadamente o como uno lo haría para ir a su oficina puede coartar la sociabilización necesaria por tener un aspecto descuidado. Respeta un cierto código en la vestimenta, porque durante una jornada de teletrabajo es más que probable que en algún momento debamos atender una video-llamada. Mejor estar presentables.

Contacto con compañeros

Trabajar desde casa a veces permite desconectar de tal modo que pueden perder los claros beneficios de la convivencia con otras personas. No contarás con momentos como una relajante  conversación distendida en una pausa para el café o un intercambio de opiniones fortuito de un tema extra-laboral. Evita un aislamiento total y prolongado y recuerda que el ser humano es un animal social. Procura mantener contacto con otras personas y aprovecha las múltiples herramientas disponibles que facilitan establecer video-llamadas que permiten interactuar con otras personas.

Espacio de trabajo

Un estudio de la Unión Europea corroboró que las personas que trabajan desde casa tienen una mayor tendencia a trabajar más horas y a restarle tiempo a la vida personal que aquellos que siempre trabajan en la oficina. Para combatir esto, se sugiere crear un espacio dedicado exclusivamente para trabajar. No se debe trabajar ni en la cama, ni en el sofá, por más cómodos que parezcan. Las áreas de relajación de la casa no se deben asociar con el trabajo y mantén tu teléfono y portátil fuera de su habitación cuando duermas, para que así no estar constantemente conectado al trabajo.

Hidratación y ejercicio

Al no tener gente alrededor, puede ser fácil dejarse atrapar por el ordenador y llegar al olvidarse incluso de tomar agua. Este hábito es clave para ayudar a prevenir la alimentación sin sentido, ya que a menudo confundimos la sed con hambre. Mantenerse hidratado no solo ayuda en términos de energía, sino también a estar enfocado y llevar un estilo de vida productivo y saludable como también lo es hacer ejercicio todos los días, en la medida de lo posible, por la mañana. Esto hace que nuestro organismo permanezca activo y contribuye a desconectar mentalmente de trabajo y fijar otras metas.

Los datos oficiales demuestran que no en nuestro país no existe todavía una apuesta en firme por el teletrabajo. La falta de una cultura responsable y la tendencia dominante de un modelo laboral que otorga un gran valor a la presencia física en la oficina, dificultan el cambio de paradigma en muchos negocios a pesar que está demostrado que es una forma clara de ganar productividad en determinados puestos y sectores. Queda mucho camino por recorrer y todavía hay muchos negocios que deben modernizarse para aprovechar las herramientas digitales.

OnTek puede contribuir a ello con el asesoramiento de un equipo experto y polivalente para definir y concretar sus necesidades. Podemos ayudarle a seleccionar las herramientas adecuadas a su actividad y acompañarle durante todo el proceso de implementación de estas y otras soluciones de trabajo en equipo.

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